sábado, 17 de noviembre de 2007

Aguinaldo

Dedico este poema a todos los que sólo lo vemos pasar cual agua escurriéndose en las manos.

Por fin llegaras en estos días,
Mis manos te tendrán solo un momento,
para luego sufrir el cruel tormento
De que te esfumes en ese mismo día.
Marcharás prodigando tus favores,
A esa gente que rige tu destino.
La leche y la cuenta del vecino
Y a todos los feroces cobradores.
Dentro de un año esperaré tu regreso,
Con ansias locas y afán desesperado
Y al llegar no más te doy un beso
Y vuelves alejarte de mi lado.
Yo quisiera que fueras más gordito
Y que no tuvieras tantos pretendientes,
Para que no te torturen tantos clientes,
Y poder gozarte completito.
Me gustaría tenerte más seguido
Pero se que nada puedo hacer
Y si eso sucediera gritaría de placer
Porque creo que te tengo merecido.
Muchos meses te he esperado
Y siento que el corazón más me palpita
Pues tu llegada esta tan cerquita
Que me estoy sintiendo anonadado.
Autor: Un Empleado Desesperado

1 comentario:

Ni modo, verifica la palabra para comentar, no me gusta, pero de repente entra mucho spam... De cualquier manera, agradezco tu visita a este, tu espacio.